En la guardería trabajan solamente profesores cuya lengua materna es el inglés, español o polaco. Proceden de diferentes países y continentes, así que junto a la enseñanza del idioma transmiten también conocimientos sobre su cultura y el respeto hacia la diversidad y la individualidad. Los idiomas no se confunden. Durante una mitad del día los profesores utilizan solamente su lengua materna. Por la tarde cambian el profesor y el idioma utilizado. Para las tres lenguas se aplica el mismo programa educativo. 

Los temas de las sesiones se repiten, pero en cada una de las lenguas se introducen por medio de ejericios distintos, lo que garantiza la atractividad de los ejercicios y un desarrollo equilibrado en el manejo de cada uno de los idiomas.